No
había leído hasta ahora nada de Teresa Viejo a pesar de tener varios libros
publicados y os confieso que tampoco tenía previsto leer su última publicación,
pero los azares del destino la puso en mi camino y tras leer diversas opiniones
muy variadas me animé con ella. Hoy os hablo de Animales domésticos.
Sinopsis
«Me
llamo Abigail y mi vida ha estallado en mil pedazos. Este es el relato de cómo
los he ido recogiendo en busca de saber quién soy. Y quiénes han sido las
personas que han estado a mi lado.
He
descubierto de mí cosas que no sabía. Algunas muy oscuras. He caído en la
tentación repetidas veces. He sentido rencor y he urdido una venganza sin que
me preocupasen las consecuencias. No me importa que me juzguéis, yo misma lo he
hecho. Pero sé que cuando leáis esta historia a pesar de todo me entenderéis.
Al fin y al cabo estoy hablando de amor. Y es normal pensar que el amor no
tiene límites.
La
vida nos pone encrucijadas para que demostremos de qué madera estamos hechos.
Como aquella caja de galletas de la infancia que esperaba en lo alto del
armario. "No la cojas", advertía mi madre, sin embargo me faltaba
tiempo para ir a por ella cuando desaparecía. Me pregunto cómo reaccionas tú
cuando te prohíben algo. ¿Qué harías ante la caja de galletas?».
Esta
no es la historia de una infidelidad, donde víctima y victimario alternan sus
papeles poniéndose a prueba hasta el final, sino una descarnada y actual
reflexión sobre las relaciones de pareja y el morbo como catalizador de la
atracción sexual.
Animales
domésticos es una historia de amor y deseo en estado de ira. Un retrato del
modo en que nos relacionamos hombres y mujeres en los frágiles tiempos del amor
light. O del «amor líquido» de Zygmunt Bauman, en el que la conexión sexual
prima sobre cualquier tipo de vínculo que implique compromiso. Un texto tan
visual cuya lectura resuena a series que abundan en el universo de las
relaciones cuando se añade otra variable a la ecuación de la pareja, como Big
Little Lies, The Affair o Gypsy.
Animales
domésticos es el grito desgarrado de Abigail, una mujer con la que resulta tan
fácil empatizar que da vértigo reconocerse en ella. Una reflexión sobre el
estigma de la infidelidad y la lealtad, sobre la exclusividad sexual, los
tabúes, el morbo, la curiosidad, los límites en la privacidad dentro de la
pareja; sobre la sensualidad y el poder sexual de una mujer a la que el hombre
teme y desea a partes iguales, y su necesidad de ejercerlo. En suma, una
historia de condena y redención.
Mi opinión
Abigail
y Fernando forman un matrimonio digamos medianamente feliz, con un hijo
pequeño. Un matrimonio en el que parece que hace tiempo se apagó la chispa de
la pasión sin que esto aparente ser nada especialmente preocupante dada la
cantidad de años que llevan juntos. Fernando es arquitecto, aunque
profesionalmente las cosas no le van muy bien, todo lo contrario que Abigail
que dirige con éxito un negocio inmobiliario que es el sustento económico de la
familia, pero ahora a él se le presenta una buena oportunidad en Chile por lo
que tendrá que pasar algún tiempo allí. Cuando Abigail lo deja en el aeropuerto
nada le hace prever que su mundo, tal y como lo concebía hasta ahora, está a
punto de venirse abajo y es que por casualidad entrará en el ordenador de
Fernando y descubrirá un correo electrónico bastante apasionado firmado por
Orquídea Negra.
Comienza
así una historia llena de sorpresas en la que Abigail es la gran protagonista y
quizá sea justo en este punto donde radica el principal problema que he tenido
con esta novela que ya os anticipo no me ha gustado. Abigail me ha resultado no
ya detestable, que también aunque esto no impide que una novela guste o no,
sino principalmente poco creíble en muchas de sus actitudes, salvo que estemos
hablando de una persona que padece una demencia sobrevenida tras descubrir la
infidelidad de su marido ya que de otra forma no puedo entender ni la evolución
ni la mayoría de decisiones y reacciones de una mujer que a pesar de arremeter
contra su marido, parece más preocupada por culpar a terceras personas y por
tramar una venganza hacia a ellas. Además, el camino que emprende en ocasiones,
lejos de parecerme la reacción lógica o esperable de alguien tras una
infidelidad, me ha resultado más parecido al deseo oculto de saciar una sexualidad
reprimida.
En
esa loca búsqueda de la verdad que la protagonista emprende, Teresa Viejo
realiza un viaje que supongo intenta explorar la sexualidad en su más amplio
sentido y las distintas alternativas por las que pueden optar dos adultos en
sus relaciones de pareja. Digo supongo porque no es así como lo he sentido yo
durante la lectura ya que mi impresión ha sido la de estar leyendo una
apresurada relación de todo tipo de filias y prácticas sexuales en todas sus
vertientes, en solitario, en pareja, en grupo… afortunadamente sin profundizar
en ninguna de ellas, y un recorrido por los medios y lugares donde conseguir la
compañía y culminar cualquier tipo de deseo, así que pasearemos tanto por
locales liberales de intercambio de parejas y similares y por conocidos lugares
madrileños donde practicar cruising. Es cierto que en general estos
no son temas sobre los que me interese leer, pero en esta ocasión se añade la
sensación que he tenido de detectar una cierta moralina latente con la que en
lugar de limitarse a exponer gustos y deseos sexuales, se juzga lo que dos
adultos con plena capacidad de consentimiento y en el ejercicio de su libertad,
deciden hacer con su sexualidad.
Los
libros se asemejan a veces a los seres vivos ¿verdad? En el sentido que a cada
uno pueden producirnos sensaciones muy distintas y éstas, bastante alejadas de
las opiniones que he podido leer, son las mías con Animales domésticos. Quizá
yo no haya entendido nada de lo que quería contarme Teresa Viejo, puede ser,
pero para mi gusto la novela toma unos derroteros inexplicables que no me han
convencido.
Se nota que no lo has disfrutado.Ya sabes que yo me quedé con otras impresiones de ella.
ResponderEliminarPues nada, hoy vamos de novelas que nonos han gustado no? Este lo dejo pasar, jaja
ResponderEliminarBs.
Ya sabes que yo tampoco entendí la reacción de Abigail ante su situación. A ti te ha gustado menos aún, pero las impresiones son muy parecidas.
ResponderEliminarBesos
Pues no me animo.Ya leí a la autora hace años y aunque el argumento no tenía nada que ver no me convenció y este no me atrae y en general tampoco ha convencido.
ResponderEliminarUn beso
No estaba muy convencida porque el argumento de la trama no me atraía, pero después de leerte ya lo tengo claro viendo lo poco que te ha gustado. Besos
ResponderEliminarTampoco me interesan esos temas mucho, no me atrae demasiado esta novela.
ResponderEliminarBesos.
No me atrajo desde el primer momento y, obviamente, ahora menos aún ya que no está convenciendo
ResponderEliminarBesos
He visto varias reseñas y ya me pica la curiosidad :)
ResponderEliminarSí parece que hay opiniones para todo con esta novela, a mí me apetecía...me atraía la trama. Pero veo que al final no me voy a animar, porque prefiero centrarme en otras historias que sí sé que me gustarán. Además lo de las moralinas no va conmigo, soy algo rebelde y tengo mis propias ideas ;)
ResponderEliminarBesitos
A mi me gustó más la otra novela de Teresa Viejo que leí hace tiempo, aunque en los dos casos me costaron las primeras páginas. En cualquier caso, creo que esta me ha gustado algo más que a ti. Besos.
ResponderEliminarJo, que lástima... Vaya sensación más chunga se te ha quedado.
ResponderEliminarMe tocó en el blog de M. Ángeles, así que le tocará turno en breves.
BEsos.
Pues vaya opiniones más encontradas tiene esta novela... lo que comentas del personaje y sus reacciones incongruentes, sumado a la moralina latente, como que me tira muy para atrás. No creo que lo lea a corto plazo, la verdad.
ResponderEliminar¡Besote!
Hola, Manuela. No me seducía nada esta novela y al leer tu reseña ya tengo claro que la dejo pasar.
ResponderEliminarGracias y un beso.
La verdad es que la tenía descartada porque no termina de llamarme.
ResponderEliminarUn beso ;)
Lo he descartado, leyéndote creo que no lo disfrutaría...
ResponderEliminarBesos
Uy! Pues la descartó totalmente, había leído lo de el cambio de registro de la autora y eso era lo que me atraía porque una novela anterior no me gustó, pero me intuyo los derroteros de la historia y creo que yo tampoco la disfrutaría .
ResponderEliminarUn beso
Hola! No es un libro que me llame especialmente la atención, creo que es una historia que no llegaría a disfrutar y viendo también la sensación que te ha dejado a ti lo descarto, prefiero leer antes otras cosas.
ResponderEliminarBesos!
Lo tengo esperándome en la estantería, solo necesito tiempo.
ResponderEliminarBesitos 💋💋💋
Pues no me llamaba nada. Después leí una reseña y me lo empecé a plantear, y ahora leo esta...no sé yo, lo dejo en suspenso, que hay muchas alternativas, jeje. Un besote!
ResponderEliminarViendo por donde va la novela, la descarto, no la entendería ni disfrutaría.
ResponderEliminarBesos
Una reseña distinta a otras que he leído. Siempre digo que esto suma en vez de restar. De Teresa Viejo solo leí una novela que me gustó bastante y por eso no descartaba leer esta pero ahora iré con pies de plomos. Besos
ResponderEliminarCoincido bastante. No me gustó como como ensamblado el personaje de Abigail. Me parece un poco "calienta-polla". Hasta que no se dan cuenta que su marido le es infiel, no sé lo empieza a follar. Tarde, mamita!
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