Descubrí a Mikel Santiago con La última noche en Tremore Beach. Aún recuerdo el miedo que pasé leyendo esa novela durante un solitario fin de semana en el que las tormentas se sucedían tanto en la novela como en mi ciudad y a mí las tormentas siempre me han dado muchísimo miedo. Aunque es ese primer libro el que sigue ocupando el número uno de mi particular ranking con el autor, todas las lecturas que vinieron después me hicieron pasar magníficas horas de lectura y así devoré El mal camino, El extraño verano de Tom Harvey y La isla de las últimas voces, así que no es de extrañar que cuando sé que publica de nuevo anote diligentemente la fecha en mi agenda. Hoy os hablo, con un poco de retraso ya que la leí el pasado mes de julio, de El mentiroso.
Mi opinión
Cuando Álex se despierta en una abandonada nave industrial con un fuerte golpe en la cabeza y con un cadáver a su lado, no es capaz de recordar nada de lo ocurrido en los dos días anteriores a ese momento. Ni cómo ha llegado hasta allí ni quién es la persona que yace a su lado ni, por supuesto, si ha sido él el causante de su muerte ya que el cuerpo presenta signos visibles de violencia. Y evidentemente, si no no tendríamos novela, Álex decide huir de allí y no contar nada a nadie, sino intentar reconstruir él mismo las horas precedentes a ese momento.
La primera sorpresa con El mentiroso es la ambientación nacional de la trama y es que el autor deja de lado sus habituales escenarios internacionales para trasladarnos a un pueblo del País Vasco en el que disfrutar de sus paisajes, de sus acantilados, del viento que azota y de lo encabritado del mar. Por lo demás, continúan intactas muchas de las señas de identidad de sus novelas: estilo directo, ritmo ágil y trama con acción y absorbente. Entretenimiento puro y duro con una historia que te atrapa desde la primera página y que se va enredando más y más, enlazando una mentira con otra, conforme avanzamos y vamos intentando recuperar la memoria junto a Álex, quien de vez en cuando tiene recuerdos en ráfagas que en lugar de ir aclarando las cosas, lo van llenando de inquietud y a nosotros con él.
Intriga, misterio y mentiras son los ingredientes de esta novela que se lee casi sin darnos cuenta. Pero no solo mentiras del protagonista, sino que todos los personajes parecen tener algo que ocultar y el lector sin remedio intentará discernir la verdad del engaño, quizá por ello no cobra mayor importancia el rápido y escueto esbozo que de los perfiles se realiza y es que en El mentiroso lo importante es saber qué ocurrió, quién lo hizo y por qué. Por el camino giros y sorpresas, en ocasiones totalmente impredecibles, hasta un desenlace impecable que ni en mis más locas teorías fui capaz de adivinar.
Y todo ello nos lo cuenta Mikel Santiago a través de un narrador protagonista con el que vivir todas y cada una de las emociones y sensaciones de Álex, al que más de una vez quise gritar que dijera la verdad de una vez, y con la prosa directa y visual a la que nos tiene acostumbrados. Descripciones justas y precisas y abundancia de diálogos son clave para que la novela goce de una gran agilidad en la lectura.
En definitiva, El mentiroso en una novela muy entretenida con grandes dosis de intriga escrita a ritmo de thriller por lo que si buscáis una novela con la que no poder parar de leer, esta es perfecta.
Lo tenemos pendiente, a ver qué tal está :)
ResponderEliminarA mí también me pareció muy entretenida y con ese estilo tan suyo que te mantiene atada a sus páginas sin remedio, pero hubo algunos detalles que no me convencieron demasiado. Besos
ResponderEliminarPues nada, tendré que leerlo, que se ve muy entretenido.
ResponderEliminarBesotes!!!
¡Hola! Me alegro que haya sido una novela de la que has disfrutado. Personalmente no es una lectura que me llame especialmente la atención, así que en esta ocasión prefiero dejarla pasar.
ResponderEliminar¡Nos leemos!
"El extraño verano de Tom Harvey" me espera en los estantes de mi librería desde ya no sé cuanto tiempo. A ver si esta reseña tuya me sirve para ponerme con Mikel Santiago de quien (¡perdón, perdón!) aún nada he leído.
ResponderEliminarBuenos días
Sólo he leído una novela del autor que me gustó mucho, no me importaría seguir leyéndolo
ResponderEliminarBesos
Hola, Manuela. Había descartado esta novela y ahora ya mismo quiero tenerla, la compraré en digital.
ResponderEliminarBesos y gracias.
Vaya! dejas muy bien al autor y a sus libros, me ha encantado el ambiente de estar leyendo una novela de miedo durante un finde de tormenta. Buena reseña y un saludo
ResponderEliminarCoincido contigo en que es entretenimiento en su máximo exponente, pero también cuenta con alguna escena demasiado rocambolesca que no me acabé de creer. Besos
ResponderEliminarPues yo he tardado mucho en iniciarme con este autor pero al fin este verano leí el de Tremore Beach y me sorprendió mucho; no sé qué esperaba pero tenía un toque a lo Stephen King que me pilló por sorpresa. Ya tengo en la estantería el de Tom Harvey y será con el que siga, pero vamos, que tarde o temprano llegaré a este que nos traes.
ResponderEliminar¡Besote!
A mi me gustó bastante. Tienes razón, entretiene mucho
ResponderEliminarNo le pido más a este autor. He leído todos los anteriores, me falta este (que caerá seguro). Un besote!
ResponderEliminarHola,
ResponderEliminarcoincidimos en impresiones y también en nuestro libro preferido del autor, el mío también es La última noche en Tremore Beach, me encantó, seguido de cerca por La isla de las últimas voces.
Un beso