29 de agosto de 2012

Trilogía "Los Juegos del Hambre" (Suzanne Collins)


He leído (devorado) en una semana esta trilogía compuesta por:
  • Los juegos del hambre
  • En llamas
  • Sinsajo
No voy a hacer una sinopsis de los tres libros ya que eso lo hacen muy bien las editoriales así que prefiero transcribir la correspondiente al primer volumen:

26 de agosto de 2012

Tierras de cristal (Alessandro Baricco)

Para J., que me dio a conocer este maravilloso fragmento...y a quien debo pedir disculpas porque aún no he leído el libro.


"Aquellas dos imágenes le habían entrado por los ojos como la instantánea percepción de la felicidad absoluta y sin condiciones. Se las llevaría consigo para siempre. Porque es así como te fastidia la vida. Te pilla cuando todavía tienes el alma adormecida y siembra en su interior una imagen, o un olor, o un sonido que después ya nunca puedes sacarte de encima. Y aquella era la felicidad. Lo descubres después, cuando ya es demasiado tarde. Y ya eres, para siempre, un exiliado: a miles de kilómetros de aquella imagen, de aquel sonido, de aquel olor. A la deriva."

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25 de agosto de 2012

Libertad (Jonathan Franzen)

En esta novela Jonathan Franzen nos ofrece un retrato de la sociedad americana desde los últimos años del s. XX hasta los inicios del s. XXI y con una prosa sorprendentemente sencilla nos habla de temas tan complejos como la política, la confrontación de ideas entre republicanos y demócratas, el ecologismo, la superpoblación, el libre mercado, la reconstrucción de Irak…y aún así no es una novela política, ni medioambiental, ni siquiera es una novela sobre lo frívola que puede llegar a ser nuestra sociedad en la que absolutamente todo, hasta la lucha por el medioambiente, está mercantilizado. No…Libertad es una novela sobre una familia americana, los Berglund, demócrata y progresista, que lo tenía todo para ser feliz y no alcanza a serlo a pesar de aparentarlo, unos personajes de clase media que se ven atrapados no sólo en esa sociedad que se retrata sino en sus propias vidas, en sus propios sueños que un día dejaron atrás casi sin darse cuenta. 
Patty quería ser todo lo que su madre no había sido: buena esposa, buena madre… Walter quería ser ante todo una

24 de agosto de 2012

Entre mis libros y yo...



En todos los recuerdos de mi infancia veo a mi padre con un libro en las manos. Sí...claro que lo veo haciendo otras muchas cosas: volviendo a casa del trabajo, jugando con nosotros, encendiendo por primera vez aquella maravillosa televisión en color que nos dejó a mi hermano y a mí pegados a la pantalla horas y horas, lo veo conduciendo, con mi madre al lado y nosotros detrás contando cuántos coches adelantamos y cantando... Pero mi recuerdo más preciso y precioso es mi padre y sus libros y a día de hoy así le sigo viendo: con un libro en las manos a la menor oportunidad y, por qué no decirlo, quitándome mi ereader también a la menor oportunidad.

Y así nació mi pasión por la lectura: primero supongo que serían cuentos infantiles pero curiosamente no consigo recordarlo, después las habituales lecturas juveniles de la época como Los Cinco, Los Hollister, Puck...y más tarde la fantástica biblioteca de mi padre. Tenía catorce años cuando empezaron a llamarme la atención todos esos libros que veía en la librería, alineados unos junto a otros, sin ningún orden preestablecido salvo aquellos que formaran parte de alguna colección o serie. No tenía ni idea de por cual empezar hasta que decidí que esa colección de un color rojo granate, con el lomo recuadrado en negro y dentro de él unas maravillosas letras doradas con el título podía ser un buen comienzo y, a falta de cualquier otro criterio, cogí el número de 1 de esa colección de best sellers: El Padrino de Mario Puzo.



Ni qué decir tiene que cuando mi padre me vio con él me prohibió terminantemente leerlo por no ser adecuado para mi edad... Y ni qué decir tiene que aquello sólo sirvió para estar más decidida que nunca a leerlo, aunque evidentemente a escondidas.

Supongo que ya ha quedado claro que me apasiona la lectura pero si hay otra cosa que me vuelve loca es hablar de libros así que hoy nace este blog en el cual os iré contando qué leo, qué no leo porque no lo soporto -y es que ya no acabo todos los libros que comienzo aunque son pocos los que se quedan a medias- y, sobre todo, qué opino de lo que leo. Y hoy, en su nacimiento, quiero dedicárselo a mi padre por enseñarme a amar la literatura, por enseñarme a soñar con los ojos abiertos sin poder despegarlos de una página, a viajar sin moverme de casa...  ¡Gracias papá!