"A pocos días de Navidad, un suceso de gran envergadura irrumpe en las vidas de Lucie Hennebelle y Franck Sharko, policías de la famosa sección criminal del número 36 del Quai des Orfèvres. Aparece el cadáver de Christophe Gamblin, periodista de sucesos, encerrado en el congelador de su casa y su compañera desaparece mientras llevaba a cabo una serie de entrevistas sobre un caso explosivo del que nadie conoce los detalles. La única huella que parece haber dejado es su nombre garabateado en un papel que conserva un niño vagabundo y muy enfermo. Al mismo tiempo, un antiguo caso de mujeres secuestradas vuelve a salir a la superficie: víctimas arrojadas vivas pero inconscientes a lagos prácticamente congelados, y rescatadas in extremis gracias a varias llamadas anónimas a la policía. Las señales de un asesino brutal obsesionado con la hipotermia arrastrará a Lucie y a Sharko hacia la zona prohibida de un lugar aterrador y devastado. Mientras la investigación se acelera, Sharko se enfrenta a viejos demonios que le conducirán a un duelo secreto y cruel que le irá destruyendo."
Franck Thilliez es ingeniero en nuevas tecnologías aunque en la actualidad se dedica exclusivamente a la literatura. La primera novela de este autor francés fue "El ángel rojo". En 2010 publicó "El síndrome E" (reseña aquí), primer volumen de un díptico sobre la violencia, seguido de Gataca (reseña aquí) en 2011 y Atomka en 2012.
Que caí rendida a los pies de Thilliez cuando hace poco leí "El síndrome E" queda patente, si es que no había quedado ya con la reseña, por el hecho de haber leído sus tres últimos libros en el espacio de un mes aunque intercalando otras lecturas entre ellos por aquello de intercalar géneros. Si a esto le añadimos que antes no solía leer novela negra creo que queda bastante claro que este autor me ha seducido y que ahora me debato sobre leer o no sus libros anteriores o simplemente esperar a que publique de nuevo y así no saturarme con el comisario Sharko.
En esta nueva novela de Thilliez son tres los hechos que desencadenan el comienzo de una nueva investigación de Sharko y Lucie: el descubrimiento del cadáver de un periodista en el congelador de su casa; la desaparición de una compañera de éste, periodista de investigación; y la aparición de un niño vagabundo, anónimo y enfermo con el nombre de la periodista desaparecida garabateado en un papel. Paralelamente a estos tres hechos saldrá de nuevo a la luz una antigua investigación sobre mujeres arrojadas a lagos casi congelados y el comisario Sharko comenzará a recibir una serie de anónimos llenos de amenazas relacionados con su pasado. Es decir, que nuevamente el autor, siempre con una investigación científica de fondo, nos ofrece un embrollo increíble de tramas que parecen no tener nada en común.
La novela se estructura en un prólogo y tres partes subdivididas a su vez en capítulos no excesivamente largos. Este formato junto a un equilibrio perfecto entre narración y diálogo hacen que la lectura sea ágil. Todo ello unido a una trama con un ritmo trepidante y llena de giros argumentales que te dejan con la boca abierta, hacen de esta novela uno de esos libros que no puedes dejar de leer aunque eso signifique, en mi caso, apagar la luz para dormir mucho más tarde de lo que tenías previsto.
Franck Thilliez |
La prosa de Thilliez sigue siendo muy directa y concisa. Me gusta lo fácil que Thilliez hace que te sumerjas en atmósferas de lo más tétricas y opresivas. Su forma de ir ofreciendo los datos, ninguno accesorio, poco a poco hace que la dosis de intriga vaya aumentando hasta llegar a un cierre redondo donde las diversas tramas que en un principio parecían imposibles de conectar, encajan cual puzzle, sin fisura alguna, no quedando ningún cabo suelto.
Esta forma de ensamblar distintas tramas con un nexo común de unión, junto con el componente científico que siempre encontramos en las novelas del autor, parecen ser sus señas de identidad. Y es que, de nuevo en esta novela, la base de todas las tramas se halla en una investigación científica que va mucho más allá de los límites de la ética y la moral. Además, como ya he comentado en las reseñas de sus anteriores novelas, la labor de documentación que se aprecia es apabullante ya que se nos ofrecen muchísimos datos científicos pero siempre con un lenguaje claro y cercano que cualquiera puede entender aunque no tenga ni formación ni conocimientos sobre los temas que se tratan.
Lucie y Sharko vuelven a viajar por distintos lugares en esta novela. El autor ya nos tiene acostumbrados a que sus personajes no se queden en París para llevar a cabo su investigación y en esta ocasión, además de desplazarse dentro de Francia, lo harán también a Estados Unidos, Ucrania y Rusia. He apreciado en "Atomka" que Thilliez se detiene un poco menos en describir estos lugares por lo que aparecen un tanto desdibujados, cosa que no ocurría en anteriores entregas, especialmente en "El síndrome E", donde cada escenario estaba descrito de forma que rápidamente te sentías ubicado en él.
En otro orden de cosas, comentar que me ha encantado la portada de la novela, lejos del negro de las dos anteriores, ya de por sí impactantes, ésta lo es aún más si cabe. Creo que representa muy bien la dureza y frialdad despiadada que nos vamos a encontrar en sus páginas.
En mi modesta opinión, creo que Franck Thilliez es sin duda un referente en el panorama actual de la novela negra y ésta su última novela es la que más me ha gustado hasta ahora. Es una novela muy dinámica, recuperando el ritmo trepidante de "El síndrome E" que quizá perdió un poco con Gataca, así que no me queda más que recomendar encarecidamente este libro que, sin duda alguna, estará entre mis mejores lecturas del año.
Ficha técnica
Título: Atomka
Autor: Franck Thilliez
Editorial: Destino
Nº de páginas: 560
ISBN: 9788423346288
Esta reseña forma parte de la II Edición: mes de la novela negra, policíaca y de misterio.
Tengo muchísimas ganas de empezar con este autor, la verdad es que todos hablan maravillas de el.
ResponderEliminarGracias por la recomendación
Besos
Leí "El ángel rojo" pero luego no me he decidido a leer otro de la serie, aunque tengo en casa tres. Quizás me anime este verano con "Expediente E" y si me gusta, haga como tú y me lea varios seguidos. Un beso
ResponderEliminarHola Mi niña que pinta tiene el libro me gusta mucho el genero pero no conocia este libro. apuntado. besos
ResponderEliminarYo todavía no me he estrenado con este autor pero le tengo muchísimas ganas, todavía no he visto ningunao opinión negativa. Lo único que empezaré por el primero y para llegar a este aún me queda
ResponderEliminarbesos
Tengo ganas de meterme con este autor, del que tengo dos de sus libros en casa (uno es precisamente éste), pero me han aconsejado que si es posible empiece por el Angel rojo, así que voy a intentar hacerlo de esta manera. Un beso.
ResponderEliminarTodavía no me he estrenado con el autor, pero con tanto entusiasmo lo tendré que hacer :-) Un besote!
ResponderEliminarTengo ganas de leer algo de este autor...pero tengo que hacerme aún con el primero jeje
ResponderEliminarUn beso!
Creo que ya te dije que no lo había leído en tu anterior reseña, pero ganas no me faltan. Besos
ResponderEliminar¡Qué ganas de estrenarme con este autor! Si es que a todos os está encantando!
ResponderEliminarBesotes!!!
Todavía no he leído nada de este escritor, pero viendo lo que contáis, está claro que esta novela no debo perdérmela.
ResponderEliminarUn beso.
Tengo ganas de leer a este escritor, tengo uno de sus libros por casa desde hace un montón!
ResponderEliminarBesotes