29 de agosto de 2014

La lágrima de la India (Ismael Cruceta)


La que parecía que iba a ser una historia de amor, resultó ser una novela sobre la amistad, sobre una amistad limpia que unió a Leonardo Soto y Anita Reina de Córdoba más allá del tiempo y del espacio. Él, un escritor de éxito al que el destino le puso en el camino a Soledad una y otra vez, entre recuerdos de infancia, canciones de Jacques Brel y pies descalzos. Y ella, Anita, que se embarcará en un viaje maravilloso a Sri Lanka, un país donde buscará a gente con la tez morena y los ojos de color aceituna, un paraíso de playas y templos con dos décadas de conflicto armado a sus espaldas, una guerra ciega que tan desapercibida ha pasado a los ojos del mundo. Y ambos, sin saberlo, se salvaron mutuamente del olvido.
Una novela que es un homenaje a dos ciudades: Madrid y Montpellier, y a todo un país, Sri Lanka, caótico, hermoso, desconocido. Una historia que hará vibrar las emociones del lector, luminosa, amable y cargada de melodías. La lágrima de la India no es sólo para leer, sino también para sentir, para sonreír. Con tres personajes coherentes, a veces controvertidos, a veces incomprendidos, pero siempre valientes. Una novela de viajes. De destinos y verdades. De vida. Y de amistad, sobre todo de amistad. 

EL AUTOR

Ismael Cruceta nació en Móstoles en 1986, es Licenciado en Periodismo y Máster en Relaciones Internacionales Iberoamericanas por la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Su formación se ha completado en ciudades como Barcelona, Londres o Montpellier, donde residió durante un año. 
Ha trabajado en la Oficina de Coordinación Residente de la Organización de las Naciones Unidas en Bolivia y, además, ha colaborado en proyectos de Cooperación al Desarrollo en varios países de Sudamérica.  
Ha sido redactor del semanario especializado en inmigración y Latinoamérica Sí Se Puede y ha colaborado en otros medios de comunicación, como Radio Sol XXI, El Boletín o Invertia.com, entre otros.
Su debut en el mundo de las letras llegó en 2009 con Luz de libertad, que comenzó a escribir cinco años antes. La lágrima de la India (Entrelíneas editores, 2012) es su segunda novela. 

MI OPINIÓN

Hace unos meses tuve la oportunidad de conocer a Ismael Cruceta en un encuentro bloguero y yo, que ya sabéis que parece que vivo en otro mundo y en ocasiones no me entero de nada, ni conocía su blog ni sabía que era escritor. Poco tiempo después, con ocasión de la Feria del Libro de Madrid, uno de los muchos días que fui por allí dio la casualidad que estaba firmando “La lágrima de la India” y me acerqué a saludarle sin ninguna intención, he de decir la verdad, de comprar el libro ya que había leído su sinopsis y no parecía una lectura que encajara en mis gustos. Aun así finalmente terminé comprándolo para regalar y este verano, cuando la persona a la que lo regalé me dijo que le había encantado, me decidí a leerlo yo también y me alegro mucho de haberlo hecho ya que está claro que estaba equivocada con respecto al libro.

Ismael Cruceta
Ismael nos presenta un argumento sencillo, pero lleno de fuerza y dulzura a partes iguales. Tres son los protagonistas: Anita, Leonardo y Soledad. Siendo los dos primeros los que destilan carisma, probablemente porque están mucho más perfilados que Soledad a la cual no he terminado de entender ya que su perfil queda muy difuminado, no llegamos en ningún momento a conocer su realidad. Es un personaje complicado, con una gran lucha interior que el autor nos deja intuir pero en la que no profundiza por lo que me he quedado con ganas de saber un poco más.

La novela comienza con el triunfo del PSOE en las elecciones de 1982. Leonardo, siendo niño, ve por primera vez a Soledad esa misma noche en que Felipe González llega al gobierno. A partir de ese momento el destino y las casualidades harán que se crucen en varias ocasiones (memorable el momento en el que sus coches paran en paralelo mientras los dos escuchan "Ne me quitte pas" de Jacques Brel) hasta que sea Anita la encargada de presentarlos formalmente. Y es que Anita y Leonardo son amigos desde que ambos eran muy jóvenes y desde entonces han compartido aventuras y desventuras, alegrías y penas, viajes, juergas, borracheras… Y aunque cada uno tiene su vida muy distinta de la del otro, nada ha conseguido nunca abrir una brecha en su férrea amistad, ni siquiera la distancia que se impondrá entre ellos y que no hará otra cosa que reforzar sus lazos.

Y es que es un libro que habla de muchas cosas, de amor, de lucha por la vida, de esperanza, pero, sobre todo, es un libro que habla del valor de la amistad siempre a través de una prosa sencilla, cuidada y tan fluida que cuando vienes a darte cuenta has leído un montón de páginas y te encuentras totalmente atrapada. Uno de esos libros en los que casi destaca más cómo se cuenta que lo que se cuenta en sí mismo y es que Ismael Cruceta derrocha sensibilidad a la hora de escribir y de transmitir emociones.

Combinando la narración y el género epistolar, al que soy muy aficionada, será a través de las cartas que Anita envía a Leonardo donde encontraremos uno de los aspectos más destacables de la novela como son las fantásticas descripciones de Sri Lanka. Ismael Cruceta consigue con ellas una ambientación impecable que hará que nos paseemos por el exótico país y que respiremos la paz y serenidad de los templos budistas, disfrutemos de sus paisajes, los cuales parecerá que estamos viendo con nuestros propios ojos, y saboreemos su especiada comida.

Una novela que te hará reír en más de una ocasión, pero que sobre todo te emocionará y te hará reflexionar hasta llegar a un final sorprendente cargado de significado.  Un canto a la amistad, a la esperanza y a las ganas de vivir por muy mal dadas que vengan las cosas en la vida. Y un autor al que sin duda volveré a leer.

27 de agosto de 2014

Recuerda (Rubén Aído Cherbuy)


El 23 de mayo de 2002, Jane y su hermano Jeremy desaparecieron durante la noche de su cumpleaños. Dos días después ella despertó en el hospital sin recordar nada de lo ocurrido, su hermano jamás apareció. Casi 8 años después, Jane intenta convivir con sus miedos, luchando con sus constantes pesadillas. El destino la llevará hasta Rockville, una modesta ciudad cercana a Seattle, con la intención de comenzar una nueva vida donde nada le recuerde su pasado. Allí encontrará un buen trabajo y vivirá junto a su novio, todo lo que necesita para comenzar. Pero pronto descubrirá que no es tan fácil enterrar el pasado, allí volverá a revivir su pesadilla y casi sin buscarlo dará con pistas acerca de la vida de su hermano que le harán conocerlo de una forma que jamás imaginó. Comenzará una investigación dejándose llevar por su intuición y con la ayuda de sus amigos y otros conocidos para averiguar de una vez por todas las verdades que se esconden en su mente, todo sobre aquella noche en la que perdió una parte de sí misma, marcándose como único objetivo, recordar. Recuerda, altas dosis de suspense y tensión hasta el final.

EL AUTOR



Rubén Aído Cherbuy  nació en Cádiz, en Mayo de 1990. Estudió entre otras cosas Comercio y Administración tras abandonar bachillerato, buscando algo que le apasionara, cosa que acabó encontrando una noche de marzo de 2010, cuando comenzó a escribir el borrador de su primera novela sin mayores pretensiones que ponerse a prueba. Aquello absorbió todo su tiempo, hasta que logró darle forma a la novela y terminarla. Desde entonces no ha parado de aumentar su cartilla de proyectos y nuevas historias que desarrollar, generalmente en su género favorito: El thriller o suspense policial. 
Se declara totalmente casero y familiar. Actualmente vive en una casa de campo con su familia, de momento sin planes de cambiarlo, alejado de las ciudades y del bullicio, con piscina, perros y tranquilidad, el paisaje perfecto para sus creaciones.


MI OPINIÓN

Quiero comenzar la reseña haciendo un comentario sobre el aspecto formal de la misma. El archivo que yo he leído (epub) enviado por el autor precisa de corrección ortográfica especialmente en la acentuación. También la maquetación es un tanto deficiente, por ejemplo, abundan los diálogos que comienzan de pronto sin el guión introductorio o al revés, narración que comienza con un guión, con el consiguiente despiste del lector, al menos mío. Entiendo que ésta no es la versión que existe a la venta pero digo todo esto porque a mí este tipo de cosas me han sacado un poco de la lectura y probablemente han influido en que no la disfrutara plenamente.

Y ya que hablo del “físico” de la novela no puedo dejar de admirar la portada la cual es muy atrayente y eso que en un ebook no se aprecia en la misma medida que en una edición física, pero aún así ese bosque con el rostro, el colgante, un hombre caminando a lo lejos… ¡me ha encantado! Si además le unimos un título breve y contundente, nos encontramos con uno de esos libros a los que me habría dirigido inmediatamente si lo hubiera visto en una librería.

“Recuerda” es un thriller policial en torno a la desaparición de dos hermanos: Jeremy y Jane. Ella apareció a los dos días sin recordar nada de lo sucedido, en cambio de Jeremy nunca más se supo. Ocho años después, Jane intenta reconstruir qué ocurrió aquella noche. Aunque ciertamente parte de una base muy trillada como es la amnesia, la novela tiene otros ingredientes que la hacen distinta a otros thrillers y es que se sale un poco de lo que es la investigación en sí misma para ofrecernos otros elementos, haciendo hincapié en los estados anímicos de la protagonista y su personalidad.

Jane es el único personaje en el que el autor se detiene para realizar un trazado más exhaustivo, dejando a los secundarios meramente esbozados. Con ella sentiremos fácilmente el desamparo, el tormento y la angustia que invaden su vida a pesar de tener un nuevo trabajo que parece satisfacerla, un nuevo piso maravilloso y un novio estupendo que se desvive por ella, pero Jane sigue viviendo obsesionada por saber qué sucedió la noche en que desapareció su hermano. No he simpatizado con ella, me ha parecido un personaje caprichoso con excesivo protagonismo de forma que el resto de los personajes casi parecen meras comparsas que bailan a su alrededor, muy especialmente en el caso del comisario Sandy, con ciertas actitudes y deferencias hace Jane que creo que estarían totalmente fuera de lugar en cualquier investigación criminal.

Rubén Aído Cherbuy
Quiero destacar que el autor se entretiene un poco en describirnos cómo son los sentimientos de pérdida en las distintas personas que perdieron a Jeremy y cómo afrontan cada uno de ellos su ausencia. No se detiene excesivamente en ello, cosa que por otro lado hubiera restado demasiado ritmo al libro, pero sí lo suficiente para haber tenido la impresión de que el autor apunta maneras para narraciones más intimistas, alejadas del género de “Recuerda”.

No estamos ante un thriller trepidante, de hecho en mi caso la tensión y el ritmo iniciales fueron decayendo conforme avanzaba la lectura ya que tenía la impresión de se iba un poco por las ramas y, además,  a partir de cierto momento me resultó muy previsible quién podía ser el culpable de lo acontecido ocho atrás y no me equivoqué aunque evidentemente las motivaciones se me escapaban.

La prosa de Rubén Aído es sencilla y directa, con un buen equilibro entre diálogos y descripciones y como os decía antes tengo la impresión de que el autor podría dar mucho juego en otro tipo de  géneros ya que tiene facilidad para trasmitir emociones y sentimientos, para hacer sentir al lector.

Un thriller que en mi opinión va de más a menos, que a pesar de partir de hechos muy vistos consigue llamar la atención del lector al principio pero que, poco a poco, va extendiéndose demasiado, volviéndose incluso un poco repetitivo hasta llegar a un desenlace en el que quedan algunos cabos sueltos. En un principio pensé que esto podía deberse a descuido del autor, pero tras hablar con él puedo confirmaros que hay segunda parte y que los interrogantes pendientes serán contestados en ella.

Ciertamente no he disfrutado de la novela tanto como esperaba, pero son muchas las cosas positivas que hay en ella y entiendo que los puntos que no me han convencido se deben probablemente a la inexperiencia del autor y es que no hay que olvidar que aunque ésta sea la segunda novela que publica, es la primera que escribió. Por eso quiero destacar que "Recuerda" tiene una buena trama aunque no esté del todo controlada y que su autor, Rubén Aído Cherbuy, apunta maneras en su forma de expresar, de transmitir y de llegar al lector a través de las emociones.


Ficha técnica
Título: Recuerda
Autor: Rubén Aído Cherbuy
Editorial: Click ediciones
Nº de páginas: 445
ISBN: 9788408126799

25 de agosto de 2014

Esta semana leo... #55


Esta semana estoy leyendo dos libros, cosa muy rara en mí, pero de vez en cuando me da por ahí aunque ciertamente suelo terminar dedicando más tiempo a un libro que a otro. Los libros que me ocupan no pueden ser más dispares entre sí: "La increíble y formidable aventura de un escritor que no quería serlo" de Depablo i Martí y "La sonata del silencio" de Paloma Sánchez-Garnica. No me preguntéis cómo me ha dado por combinar estas dos lecturas porque no lo sé, ha salido así, este fin de semana pasado ha sido entero de relax en contraposición con el verano hiperactivo que llevo y quizá mi mente y mi cuerpo, no acostumbrados a tanta inactividad, han sufrido algún tipo de reacción.

Esta semana de nuevo me marcho unos días, esta vez son sólo seis, pero necesito despedirme de la playa y del verano propiamente dicho ante el inminente inicio del curso escolar con sus rutinas y carreras. En esta ocasión, dado que me he pasado una semana solita en Madrid sin demasiados estímulos externos, sí he hecho los deberes y he dejado entradas programadas.

RETO LEEMOS EL QUIJOTE



Capítulo 29: Que trata del gracioso artificio y orden que se tuvo en sacar a nuestro enamorado caballero de la asperísima penitencia en que se había puesto.

En este capítulo Dorotea y Cardenio se ponen de acuerdo para intentar solucionar sus males y no sólo eso, sino que Dorotea se ofrece voluntaria para ayudar al barbero y al cura en la treta que tienen preparada para devolver a don Quijote a su hogar. De este modo adopta el papel de la princesa Micomicona que apurada por haberle arrebatado un gigante su reino, acude a nuestro hidalgo caballero pidiendo ayuda y, consiguiendo así, que se ponga en camino.

Capítulo 30: Que trata de la discreción de la hermosa Dorotea, con otras cosas de mucho gusto y pasatiempo.

Que Dorotea tiene muchísima imaginación y dotes para la interpretación queda claro en este capítulo en el que narra qué males la han llevado hasta don Quijote. Lo que no se le da tan bien es la geografía ya que durante su narración dice haber desembarcado en Osuna, menos mal que el cura estuvo rápido para echarle una mano y continuar así el engaño con el que pretenden que don Quijote vuelva a casa.






24 de agosto de 2014

Segundo aniversario de Entre mis libros y yo


Dos años... ¿Quién me lo iba a decir?  Cuando el 24 de agosto de 2012 publiqué mi primera entrada  jamás pensé, con lo inconstante que soy, que llegaría hasta aquí. Y menos aún pensé que tener un blog me daría tanto y tan bueno, como mi interminable lista de libros por leer que cada día os encargáis de alimentar no sea que un día de estos no sepa qué leer... y es que vosotros sois lo mejor. A unos cuantos ya os conozco personalmente y a los que no es casi como si lo hiciera, a veces comento algo y digo "pues mi amig@ fulanit@..." "¿Y es@ quién es?" "Pues del blog...". Me creéis si os digo que se me está escapando una lagrimilla ¿verdad? Ya sabéis que soy una blanda de tomo y lomo así que mejor no sigo...


¡Gracias a todos! Sin vosotros este espacio no sería nada

22 de agosto de 2014

Diario de una volátil (Agustina Guerrero)



Cosas que sientes y no puedes contar... como un te quiero, así, de repente. Cosas que te dan vergüenza, miedo, pereza... como colgar la colada con los calcetines emparejados. Cosas que te hacen sonreír, reír, llorar... como un lunes cualquiera sin café y sin amor. Un mundo entero de detalles chicos y grandes que hablan de ti, de mí y de todos nosotros.

La Volátil, una treintañera con camiseta de rayas que ve el mundo muy a su manera: aquí está por fin, y ha venido para quedarse.

LA AUTORA

Agustina Guerrero nació en Argentina y reside en Barcelona, España, desde hace ya más de doce años. Trabajó como diseñadora gráfica durante un tiempo, hasta que decidió dedicarse a la ilustración. En 2011 abrió su blog autobiográfico Diario de una Volátil, que alcanzó miles de seguidores en pocos meses y obtuvo un éxito inmediato en las redes sociales. En 2013 publicó Nina, diario de una adolescente(Montena), que ya ha sido traducido a varias lenguas.

Cuando alguien le pregunta de qué vive, a veces, lo cuenta haciendo dibujitos.

MI OPINIÓN


Ni cómics ni novelas gráficas entraban entre mis lecturas porque realmente no me llamaban la atención, pero de un tiempo a esta parte algunas publicaciones empezaron a resultarme muy atractivas cuando comencé a verlas en los blogs que habitualmente visito.

Una de esas novelas gráficas que tanto me llamaba era “Diario de una volátil” pero, no me preguntéis la razón porque no la sé, no era un libro que me apeteciera comprar, tenía que llegar a mis manos de otra forma (no, robarlo tampoco) y así fue como decidí este verano regalárselo a mi hermana que, además, es seguidora de su blog. Desde aquí le pido perdón porque sí, lo leí antes que ella, cosa que yo jamás consiento que nadie haga con mis libros, pero en mi descargo diré que se lo dejó olvidado y el libro me llamaba y sí, por una vez estaba atenta y no andaba es mis mundos y es que yo, al igual que La Volátil a menudo...



“Diario de una volátil” es un libro con el que como mínimo se sonríe y que también arranca más de una carcajada y eso, teniendo en cuenta lo rarita que soy yo para reír con los libros, hizo que me frenara un poco a la hora de leerlo y no lo hiciera del tirón sino que lo dosificara en dos ratitos en los que el buen rollo y las sonrisas fueron los grandes protagonistas al verme reflejada en más de una viñeta porque yo también asumo que...



La Volátil es una mujer de unos treinta años que tiene las mismas inseguridades, miedos, manías, deseos… que cualquiera de nosotras. Sentirte identificada con ella es muy fácil y es realmente terapeútico ver que no eres la única a la que le pasan ciertas cosas. De verdad que en el 90%de las viñetas, si no más, me he visto con nombre y apellidos así que hoy he querido ilustrar esta reseña con aquellas que son Manuela en estado puro.


En cuanto al dibujo en sí mismo de las viñetas me ha encantado. Es tan natural, tan sencillo, hasta el peinado de La Volátil me gusta, con ese moño cogido casi de cualquier manera vuelvo a verme los días que soy incapaz de llevar el pelo en condiciones, es decir, todos los días de la época estival y muchos del resto del año.


Así que no lo dudéis, es un libro para comprar, para regalar, para releer, para impregnarse de buen rollo y por qué no para reírnos un poquito de nosotras mismas. Y no creo que a pesar de plasmar el universo femenino, sea una lectura exclusivamente para mujeres sino que también los hombres pueden disfrutarlo y quizás conocernos un poco más o al menos darse cuenta de que no, su chica, su hermana, su madre… no es la única que piensa, hace y dice esas cosas.


Ficha técnica
Título: Diario de una volátil
Autora: Agustina Guerrero
Editorial: Lumen
Nº de páginas: 160
ISBN: 9788426400352

20 de agosto de 2014

Respirar por la herida (Víctor del Árbol)


Quizás Dios juega a los dados con nuestro destino, desperdigando las piezas de un rompecabezas que siempre vuelve a unirse de un modo u otro. Acaso sea el azar el que nos arrebata aquello que más amamos, pero puede que todo lo que nos ocurre sea simplemente el resultado de nuestros propios actos.

Estas son las preguntas que atormentan a Eduardo, un pintor para quien nada tiene sentido tras la muerte de su mujer y su hija, hasta que una famosa violoncelista, Gloria Tagger, le encarga el mayor reto de su vida: pintar el retrato de Arthur, un empresario de pasado incierto. Aceptar ese encargo desencadena una espiral de emociones y acontecimientos trágicos que succiona inevitablemente a cuantas personas le rodean. Con cada pincelada, Eduardo va abriendo puertas que habría sido mejor mantener cerradas, pero que, una vez abiertas, nada ni nadie podrá volver a cerrar.

Con una trama perfectamente urdida y una intensidad descarnada de dolor y culpa, pero también el ansia de vivir, Respirar por la herida desborda los límites de sus protagonistas con una precisión y una psicología digna del maestro en que se ha convertido ya su autor, Víctor del Árbol.

EL AUTOR

Víctor del Árbol, nacido en Barcelona en 1968, fue funcionario de la Generalitat desde 1992 hasta 2012.

Cursó estudios en Historia en la Universidad de Barcelona, colaboró dos años como locutor y colaborador en el programa radiofónico de realidad social «Catalunya sense barreres» (Radio Estel, ONCE). Como escritor fue finalista del Premio Fernando Lara en 2008 con El abismo de los sueños (no publicada) y ganó el Premio Tiflos de Novela en 2006 con El peso de los muertos. En 2011 publicó La tristeza del samurai (Editorial Alrevés), que ha sido un éxito nacional e internacional y cuenta con el reconocimiento de la crítica y de numerosos premios. Entre ellos, Le Prix du polar Européen 2012 a la mejor novela negra europea.  

En 2013 publica su novela "Respirar por la Herida" finalista a la mejor novela extranjera en el festival de cine Negro de Beaune, finalista en el II Premio Pata Negra de Salamanca, finalista a la mejor novela negra 2014 que otorga el festival VLNC. Traducida al francés, la prestigiosa editorial Rosenbloom ha adquirido los derechos de edición en inglés para Australia, New Zeland, UK y USA.

El 13 de mayo de 2014  publica su última novela hasta la fecha "Un millón de gotas" (Editorial Destino) cuyos derechos ya han sido adquiridos para su traducción al francés por la editorial Actes Sud.


MI OPINIÓN

Son varias las historias que Víctor del Árbol nos cuenta en esta novela, diversas tramas que convergen en un único punto y que comparten todas ellas grandes dosis de dolor y sufrimiento. Las decisiones que se han tomado en el pasado y una buena dosis de azar son los ingredientes con los que el autor teje una compleja telaraña, donde cada hilo tiene su porqué, cada personaje, con sus heridas y con su pasado  a cuestas, da vida a un entramado que el autor maneja con maestría. Una novela en la que las casualidades tienen un peso importante, tanto que su arbitrariedad causa en el lector un desasosiego difícil de explicar, una intranquilidad con tintes de temor a lo que de desconocido e incontrolable  tiene el azar.

Aunque en un principio pueda parecer que Eduardo es el personaje principal del libro, realmente estamos ante una novela coral en la que el pintor actúa como hilo conductor de la historia cuando va abriendo puertas que quizá debieron permanecer cerradas. En este libro todos y cada uno de sus personajes tienen algo importante y fundamental que aportar para el desarrollo de la historia. El trazado de todos ellos es sencillamente magnífico, son personajes complejos, llenos de aristas,  con unos perfiles psicológicos perfectamente desmenuzados por el autor que nos presenta un elenco de seres rotos a los que comprenderemos, aunque no siempre compartamos cómo piensan y cómo actúan. Con una desolación emocional aplastante en todos ellos, me he sentido conquistada de un modo u otro por todos porque a todos he visto como personas reales que sufren y hacen sufrir, que no son ni buenos ni malos completamente ya que, al igual que toda la novela, están llenos de tonalidades de grises porque difícilmente algo puede ser o blanco o negro.

Junto al fantástico perfil de los personajes otro de los aspectos que destacan en esta novela es la atmósfera de dolor, a veces opresiva, que crea el autor. Sus personajes sufren y el lector se impregna de ese sufrimiento porque leer “Respirar por la herida” duele. Y es que, como su título nos indica, es un libro en el que su máxima expresión es el dolor, todos sus personajes respiran y viven a través de sus heridas; se expresan desde el sufrimiento y la imposibilidad de perdonar y Víctor nos lo transmite de forma magistral. No puedo más que quitarme el sombrero ante el arte y el oficio del autor que, a través de magníficas descripciones tanto de personajes como de ambientes, consigue plasmar la angustia y la tortura continua que se convierte en el motor de la novela.

Víctor del Árbol
La prosa de Víctor del Árbol es sencilla lo cual no quiere decir que su lenguaje no sea muy cuidado y, sobre todo, es directa, no se pierde en datos innecesarios ni en florituras. Incluso en las escenas más brutales que se narran, que las hay, el autor no se detiene en detalles escabrosos, expone los hechos casi con frialdad y eso es lo que los hacen aún más espeluznantes. Lo que sí abundan son las metáforas de las que soy fan absoluta y con las que he disfrutado muchísimo. La narración prima por encima de los diálogos que, aunque menos abundantes, brillan con luz propia por la inteligencia de los mismos.

El autor utiliza un narrador en tercera persona a través del cual iremos conociendo cómo piensa  y cómo siente cada uno de los personajes. Aunque la línea temporal es continua nos encontraremos con diversos saltos al pasado necesarios para conocer la vida anterior de los personajes. Casi como si de microrrelatos se tratara, el autor retrocede para mostrarnos el pasado que ha labrado el presente y el futuro de unos personajes angustiados por el dolor, por la culpa, por el deseo de venganza, por la imposibilidad de seguir adelante con sus vidas y que individualmente podrían ser protagonistas absolutos de una novela distinta.

La maldad es el tema central de este libro en el que además reflexionaremos sobre la necesidad de venganza, sobre las casualidades o no casualidades, sobre lo difícil que es a veces vivir cuando se arrastra un pasado con heridas sin cerrar, sobre las pérdidas que no se pueden superar, que ni siquiera se quieren superar porque sería como perder de nuevo. De todo ello nos iremos impregnando con un ritmo pausado porque aunque estamos ante una lectura que no puedes dejar de leer, no te impele a pasar las páginas una tras otra sino que te transmite la calma necesaria para disfrutar de la escritura.

Del mismo modo he disfrutado con un desenlace magnífico. Debo admitir que temí a lo largo de toda la lectura encontrarme con algún giro descabellado para explicar y ensamblar todo lo que el autor nos había ido dando a la lo largo de la lectura. Me parecía tan complicado que me temía uno de esos finales rocambolescos que me chafan la lectura completa, pero no ha sido así. Víctor del Árbol nos ofrece un cierre magistral a la altura de esta fantástica novela en la que no necesita de giros descabellados para dejar al lector pegado a la última página, casi incapaz de cerrar el libro y seguir adelante.

“Respirar por la herida” es una buena historia, una trama perfectamente urdida contada con un estilo impecable que auna la sencillez y el mimo de la buena escritura. Es una de esas novelas que se viven, de las que no te dejan aun cuando cierras el libro y continúas con tus actividades diarias, tanto es así que ni siquiera te abandona cuando lo has terminado. Uno de esos libros que te llenan de la angustia y del dolor de sus protagonistas. Es un libro que duele leerlo. No tengo ninguna duda a la hora de recomendarla, para mí ha sido el descubrimiento de un autor que desde ya se convierte en una de mis referencias y al que volveré a leer muy pronto.

“Cuando se colma el vaso de amargura, el corazón deja de sufrir porque ya no siente”


Ficha técnica
Título: Respirar por la herida
Autor: Víctor del Árbol
Editorial: Alrevés
Nº de páginas: 528
ISBN: 9788415098799




18 de agosto de 2014

Esta semana leo... #54


¡He vuelto! Ya era hora lo sé... Lo cierto es que me incorporé al trabajo la semana pasada, pero después vino el puente y de nuevo me marché fuera y aunque aún me quedan algunos días libres para finales de este mes y principios del siguiente, el blog comienza hoy su actividad habitual y poco a poco iré reseñando todo lo que he leído durante este verano. Algunos ya lo sabéis por Twitter y a los que no os anticipo que, salvo honrosas excepciones, no he tenido buenas lecturas durante los meses de julio y agosto. En cualquier caso, el próximo miércoles os hablaré de una de esas excepciones, un libro que leí en julio y me gustó muchísimo, "Respirar por la herida", y cuya reseña, a pesar de estar programada durante mis vacaciones, cayó en el agujero negro de blogger.

Como viene siendo habitual, salvo por el parón veraniego, hoy lunes me toca contaros qué lectura me ocupará durante la semana y en esta ocasión se trata de "Azul Vermeer" de Mar Mella y lo empezaré esta misma noche. Es un libro que me apetece muchísimo y que compré en la Feria del Libro de Madrid donde además tuve la oportunidad de conocer a la autora y charlar con ella mientras tomábamos algo con otros blogueros. Sólo he leído cosas buenas de esta novela y estoy segura de que me va a encantar porque, además, trata temas a los que soy muy aficionada.

Aunque los lunes también suelo hablaros de la lectura de El Quijote hoy me lo salto ya que tengo unos cuantos capítulos atrasados y aún no me he puesto con ellos, por lo que esta sección la retomaré a partir de la próxima semana.

¡Feliz semana a todos!