Nada os voy a contar sobre el argumento de La
Ronda, el peligro de soltar sin querer un spoiler me disuade de ello,
pero sí os apunto que estamos ante una trama tan sólida como bien planteada
en la que el autor hace gala de un excelente control de la tensión narrativa,
de forma que el suspense deja paso a la acción en el momento preciso sin
que el interés del lector decaiga en ningún momento. Los giros argumentales se
suceden llevando al lector de una sorpresa en otra y, si bien no todos son tan
verosímiles como me hubiera gustado, lo cierto es que Francisco Bescós logra salir airoso incluso cuando la casualidad juega un papel excesivo en ellos.
Dos protagonistas principales, el inspector
Juan Luis Seito y la inspectora Dulce O’Rourke, son los encargados de
conducirnos por dos hilos argumentales, ambos de apariencia sencilla. Es fácil en
esos inicios caer en la idea de una novela negra más hasta que en un momento dado,
y de forma totalmente inesperada para el lector, vira hacia algo mucho más
complejo e inquietante. Dos investigaciones independientes condenadas a
cruzarse en un recorrido por Madrid, la ciudad que no solo sirve de
escenario a La Ronda, sino que es un personaje más. Un personaje de esos
que definiríamos como poliédricos porque son muchas las caras distintas y
antagónicas que esconde esta ciudad.
Con un perfecto equilibrio entre narración, a
cargo de un narrador omnisciente, y diálogos, estos últimos alcanzan su máxima
expresión cuando los protagoniza un personaje secundario, la subinspectora
Rodrigo, que en cada aparición logra eclipsar a los dos inspectores
protagonistas con intervenciones realmente sublimes y, sobre todo, con un
perfil alejado de los estereotipos de los investigadores típicos del género en
los que sí cae el autor a la hora de trazar las personalidades de los dos
inspectores. Es con ella, además, con quien se permite el autor salpicar el
suspense y la acción con ciertas notas de humor que me arrancaron más de
una sonrisa.
En definitiva, La Ronda es una novela
adictiva de ritmo ágil y estilo narrativo muy visual, no reñido con la
buena escritura. Una novela de entretenimiento puro, escrita como un
auténtico pasapáginas. Los que ya la habéis leído ¿la veis, como yo, perfecta
para el cine?
Me paso igual, me entretuvo mucho.
ResponderEliminarUn beso.
Ni me sonaba. TOmo nota, que me has dejado con ganas.
ResponderEliminarBesotes!!!
La tengo en mis pendientes desde hace tiempo, pero leyendo tu reseña veo que la tengo que poner en primera fila. Me va a venir bien algo muy entretenido y con calidad a la vez.
ResponderEliminarUn beso.
Lo apunto desde ya me gusta todo lo que comentas. Estas son de las mías jeje
ResponderEliminarA Beatriz también le ha gustado mucho y está obteniendo muy buenos comentarios. La tendré en cuenta.
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