Instrucciones para una ola de calor - Maggie O'Farrell

Propósito para 2019: leer al menos un libro al mes que lleve mucho tiempo esperando turno en mi estantería. Y empecé el año muy aplicada en mi intención de dar salida poco a poco a los eternos pendientes porque mi primera lectura nada más arrancar 2019 fue la novela que os traigo hoy, Instrucciones para una ola de calor.

Mi opinión

Una ola de calor asola Londres en 1976. Una mañana Robert Riordan, empleado de banca jubilado, sale de su casa a comprar el periódico y no vuelve. Su esposa Gretta llama a sus tres hijos que no dudarán en volver para intentar averiguar qué ha sucedido y dónde puede estar su padre.

Con este punto de partida Maggie O’Farrell construye una novela repleta de personajes inolvidables para hacer reflexionar al lector sobre los vínculos familiares y sobre cómo afectan a ellos las medias verdades, los silencios, los malentendidos, las concesiones que en ocasiones nos vemos obligados, o creemos vernos obligados, a hacer, la falta de comunicación… para reflexionar sobre el pasado que siempre late en nuestro presente y en nuestro futuro.

Una narración que por momentos alcanza gran intensidad dramática y que nos descubre el complejo engranaje de una familia mientras diserta sobre el comportamiento humano ahondando en los conflictos personales de sus miembros. Los personajes nos son presentados uno a uno para más tarde hacerlos confluir de forma que el lector ya ha empatizado con cada uno de ellos antes de entrar en el caos familiar que supone adentrarse en la intimidad de los Riordan y entremezclarse con ellos, porque justo eso es lo que consigue Maggie O’Farrell en una narración en la que lo de menos es cómo o cuándo terminen sus historias.

La autora, a través de una prosa envolvente, nos sumerge en una madeja de cotidianeidad hasta atrapar al lector en la intimidad de estos personajes sólidos y verosímiles y tocando, como en un segundo plano, otros temas como la vida de unos irlandeses católicos en una Gran Bretaña que poco o nada tiene que ver con ellos.

En definitiva, una lectura intensa con grandes personajes y una muestra de cómo un ritmo contenido no está reñido con la adicción lectora.