La no ficción y
la novela autobiográfica no se encuentran entre mis lecturas habituales, pero
cuando vi este libro en el catálogo de novedades de Lumen me quedé tan impactada
por su sinopsis, que más parecía ambientada en otra época que en los Estados
Unidos de finales del siglo XX y comienzos del XXI, que no dudé ni por un
momento que debía leerlo. Hoy os hablo de Una educación.
Mi opinión
Tara Westover,
la menor de siete hermanos, nació en las montañas de Idaho en 1986, en el seno
de una familia mormona fundamentalista para la que las escuelas no eran
realmente un donde recibir una
formación, sino que formaban parte del plan del gobierno para lavar el cerebro
a sus ciudadanos desde la más tierna infancia. Del mismo modo la medicina estaba
demonizada para ellos, bajo ningún concepto acudían a un hospital ya que los
médicos también formaban parte de ese plan del gobierno y la ingesta de medicación
solo conseguía envenenar el cuerpo. Desde pequeña, Tara Westover se preparaba
para el día en que el mundo, tal y como lo conocía, se acabara porque el
objetivo de su padre era ese, acumular armas, combustible y suministros para
ese día que sin duda estaba por llegar. Mientras, la madre, trabajaba como comadrona
y herborista, elaborando sus propios remedios naturales con los que pretendía
sanar todo, desde lo más leve hasta los accidentes más graves que en diversas
ocasiones sufrirán.
En este ambiente aislado y plagado de una violencia
brutal que los miembros de la familia terminan viviendo como algo normal,
se crio Tara Westover que obtuvo su certificado de nacimiento con nueve años,
con una fecha aproximada porque nadie en su familia recordaba con exactitud qué
día nació, y que, con dieciséis, sin haber pisado jamás una escuela,
preparándose por su cuenta, consiguió aprobar el examen preuniversitario y escapar
del entorno alienante en el que vivía. Escapar
de la alienación en la que vivía no fue fácil y en Una educación nos lo narra
con toda su crudeza y pone ante los ojos del lector cómo recibir una formación
y una educación transformó su vida. Una transformación que ha supuesto la
ruptura con la mayor parte de su familia que considera que tiene el demonio
dentro, que ella es la encarnación del mal.
Ha sido duro
leer Una educación, es una lectura
difícil en la que continuamente tenía que recordarme que lo que estaba leyendo
no era ficción, sino la realidad y una realidad enmarcada en pleno siglo
XXI en Estados Unidos. La lucha de Tara por acceder a un mundo que le había
sido negado desde su nacimiento es un proceso complejo que la autora nos narra
sin paños calientes. Y al mismo tiempo realiza
un análisis de las siempre complejas relaciones familiares y es que Tara
nos habla también de la parte feliz de su infancia, de unos años que recuerda
con cariño y que son precisamente los que, cuando escapa, hacen tan difícil la
ruptura y el distanciamiento, tanto de la familia como de sus creencias, aunque
se sepa que es lo mejor para uno mismo. Un distanciamiento que no es de un día
para otro, sino que se fragua paulatinamente conforme va consiguiendo una independencia de pensamiento gracias al
contacto con el mundo real y con la formación, una independencia de
pensamiento que la ayuda a ver y entender las cosas de una forma totalmente
distinta a cómo lo ha hecho hasta ese momento.
Y todo esto nos
lo narra Tara con una prosa pulcra y
sencilla y un estilo cercano, sin estridencias y sin dramatismos, lo que
narra ya es lo suficientemente dramático y brutal por sí mismo como para tener
que añadir más efecto que el que el propio mormonismo radical y la obsesión por
la supervivencia aportan. Del mismo modo en el dibujo de los personajes la
autora no carga las tintas, pero tampoco se calla nada. De especial relevancia
es la figura del padre y cómo Tara Westover lo expone ante nuestros ojos, un
hombre dominante y perturbado, del que su hija sospecha pueda padecer algún trastorno
mental, y que en ciertos pasajes ha llegado a ponerme los pelos de punta,
aunque mi sensación general durante toda la lectura, tanto con él como con todo
lo narrado, era la incredulidad y es que en Una educación se hace más patente
que nunca eso de que la realidad, siempre supera a la ficción.
En definitiva, Una educación es una novela
autobiográfica que nos cuenta una historia brutal, una existencia salvaje y
aislada que terminará, gracias a su esfuerzo y tesón, con la protagonista
doctorada por la Universidad de Cambridge aun arrastrando los traumas de la
infancia e intentando poco a poco cerrar las heridas. Una historia de superación profundamente reflexiva que me ha impactado
y que no dudo en recomendaros.
Oh vaya, no conocía el libro ni siquiera la historia de esto. Jaja, EUA sigue lavándoles el cerebro a sus ciudadanos diciéndoles una y otra vez que deben de "estar orgullosos de sus ciudadanos que defienden y dan la vida por su país", me pregunto yo ¿por su país (séase la gente)? ¿o por los intereses propios de sus mandatarios? Bueno, dejando de fuera eso xD creo que me anoto el libro. Gracias por la reseña♥
ResponderEliminarQue pais no "lava" cerebros?
EliminarYa sabes que lo tengo esperando y con muchas más ganas de ponerme con él después de leer tu opinión. Creo que también lo disfrutaré mucho.
ResponderEliminarBesos
No es una novela que a priori me llamará la atención, pero estoy viendo tan buenas opiniones de ella, que al final va a caer...
ResponderEliminarBesos
Creo que es una novela que podría disfrutar, aunque también creo que tendría que encontrarle un momento más tranquilo para su lectura... no lo descarto. Buena reseña.
ResponderEliminarUn beso
Hola Manuela,
ResponderEliminarya sabes que a mí también me encantó. Fue un impulso y una gran sorpresa y coincido contigo en recomendarla porque es una novela que hay que leer.
Un beso
Hola! No conocía este libro y aunque no es lo que suelo leer creo que podría gustarme. Lo voy a tener en cuenta.
ResponderEliminarBesos!
Siento cierta curiosidad por lo que cuenta pero no la suficiente como para embarcarme en una lectura como esta. Besos.
ResponderEliminarYo, en cambio, no lo veo de mi estilo. Ni siquiera me resulta atractiva la sinopsis. Así que lo dejaré pasar
ResponderEliminarBesos
No puedes ni imaginar las ganas que le tengo a esta novela, más aún después de leerte. Besos
ResponderEliminarNo me había fijado en este libro cuando salió y cada vez que os leo una reseña me apetece más, se nota que te ha impresionado la lectura y eso me gusta ;)
ResponderEliminarBesitos
Pues no me hubiera fijado en este libro. Pero no sólo me has convencido sino que me has dejado con muchas ganas.
ResponderEliminarBesotes!!!
Pues me parece una lectura súper interesante que pillaré en cuanto pueda. Es lo que dices, la realidad a veces supera la ficción, y que estas cosas sucedan en pleno USA del siglo XXI pone los pelos de punta.
ResponderEliminar¡Besote!
Es una novela que me gustaría leer.
ResponderEliminarParticipo en el sorteo. Gracias
ResponderEliminarUna reseña estupenda Manuela. En cuanto a la novela pienso que este tipo de historias aunque no sean fáciles de leer las deberíamos de leer todos, un beso
ResponderEliminarLe eché un ojo cuando salió y me llamó la atención. Luego... Ya sabes lo que suele pasar, cayó en el olvido
ResponderEliminarBesos
A mi si me gustan las autobiografías y por lo que cuentas esta me gustaría. Me la apunto sin duda.
ResponderEliminarBs.
Pues me rindo: la leeré. Es que no paráis de recomendarla, a todos os convence esta educación. Cuando leí la sinopsis me pasó como a ti, que no podía creer que fuese una historia biográfica en el siglo XXI. Supongo que eso es lo que la hace tan valiosa. Besos.
ResponderEliminarHola.
ResponderEliminarAcabo de leer "Una educación" de Tara Westover, y me "encantó" (pongo entre comillas porque para la autora ha sido una experiencia nada encantadora). Una vez comencé la lectura no pude soltar el libro... Bueno, recomiendo leerlo no teniendo en vista esto de "aaahhh qué terrible los mormones", el fanatiismo está presente en todas las corrientez religiosas y filosóficas... yo y parte de mi familia somos mormones, incluyendo dos hijas de 27 y 28 años... la experiencia relatada no tiene nada que ver con lo que viven la gran mayoría de los los miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días... recomiendo la lectura siempre y cuando lo hagas teniendo en perspectiva el fundamentalismo que desarrollan personas desequilibradas, como lo eran los padres de Tara, la autora. Saludos.
Alguien que lo tenga en PDF y me haga el favor de mandarmelo?? :( mi correo es mejiajosi@yahoo.es
ResponderEliminarhola alguien que tenga el libro en español podria enviarmelo a esta dirección por favor??
ResponderEliminarlucyascanior@gmail.com