Azul Vermeer (Mar Mella)

1675. Delft, Países Bajos

«—El panadero no nos fiará más. Ha accedido a llevarse el cuadro que queda en el estudio para terminar de saldar nuestra cuenta. Llevamos casi dos años sin pagarle.

—¿No podías haber buscado otra solución? —La boca de su madre se contrajo en una mueca—. Ya le has entregado uno y sabes que ese lienzo era uno de sus favoritos. Él habría hecho cualquier cosa antes de verlo colgado en la pared del salón de un…

—Si hubiera hecho lo suficiente, no me vería obligada a tener que hacerlo yo ahora.»

Actualidad

Marta Miralles, una brillante restauradora de pintura flamenca, accede a restaurar un antiguo lienzo sin catalogar perteneciente a la familia Medraño, propietaria de una de las casas de subastas más prestigiosas de Europa. Cuando Marta acepta el encargo, vuelve a reencontrarse con algunos de los fantasmas de su pasado, como Javier, su primer amor, y Paddy, el hombre del que estuvo enamorada la mayor parte de su vida. Pronto, la vida de todos terminará por fundirse con la historia de ese misterioso lienzo y con la obsesión de Marta por el famoso maestro Vermeer y su obra…

Azul Vermeer nos adentra con pulso magistral en el desconocido mundo del arte y los coleccionistas privados, en las intrigas que se esconden tras las galerías más prestigiosas y en el submundo que oculta el mercado negro de obras sin catalogar. Una cautivadora novela que te hará amar el arte y los colores. 

LA AUTORA

Mar Mella nació en Madrid en 1967. Su carrera profesional comenzó en cadenas hoteleras  internacionales que la llevaron a disfrutar de diferentes puestos en los departamentos de ventas, marketing y publicidad, así como de relaciones con la prensa en diversos destinos. Desde hace varios años, sin embargo, cambió la orientación de su trabajo, pasando a colaborar con varios medios de comunicación como redactora.

Ha sido, además, finalista del Premio Ateneo de Sevilla 2011. Actualmente reside en Mallorca, donde trabaja en su segunda novela.

MI OPINIÓN

Marta Miralles es la protagonista principal de este libro. De aspecto frágil y con un carácter tímido que le impide relacionarse con su entorno, arrastra un pasado complicado marcado por sus relaciones familiares y la falta de cariño. Profesionalmente se dedica a la restauración y conservación de obras de arte y es entonces, cuando se encuentra frente a un lienzo, el momento en el que Marta cambia radicalmente y deja aflorar toda su fuerza y pasión. Cuando la casa de subastas de Emilia Medraño, para quien trabajó recién terminados sus estudios, se pone en contacto con ella para un encargo en el que no sólo deberá proceder a la restauración, sino que tendrá que dilucidar quién puede ser el autor del cuadro, su vida dará un giro inesperado.

Mar Mella

Junto a Marta, todo un elenco de personajes de los que Mar Mella realiza un minucioso dibujo, analizando con detalle sus perfiles psicológicos y mostrándonos no sólo su presente, sino viajando también a su pasado para poder entender su momento actual. De esta forma, conoceremos a la ya nombrada Emilia Medraño, una mujer controladora y fría, apasionada del arte y en la actualidad retirada; Javier, su hijo, personaje que nos ofrece otra visión del mundo de la pintura y del arte en general, visión alejada de los criterios meramente artísticos y centrada en su aspecto empresarial; Ruud Smits, propietario de un taller de restauración situado en Ámsterdam, especializado en pintura flamenca, al que Marta llegará tras obtener una beca y donde permanecerá durante 10 años, convirtiéndose Ruud en algo más que su maestro y mentor, casi una figura paterna; y Paddy Donaldson, hijastro de Ruud, con quien trabaja, un personaje mujeriego y aparentemente frío, pero lleno de dulzura.

Y, como ya podéis imaginar por el título del libro, el omnipresente Johannes Vermeer van Delft, que si bien no aparece presencialmente en la novela, sí lo hace su familia y, evidentemente, sus obras pero, sobre todo, es la esencia, el espíritu de este magnífico pintor flamenco del siglo XVII el que se deja sentir a lo largo de toda la lectura en múltiples aspectos, como por ejemplo en la estructura del libro, el cual está dividido en cuatro partes titulada cada una de ellas con un color de los que más habitualmente usaba el pintor. Así nos encontraremos con: Blanco de plomo; Rojo ocre; Amarillo de India; y Azul ultramar. El primer capítulo de cada parte está dedicado a un personaje diferente: Johannes, Emilia, Ruud y Lola para, posteriormente, continuar con la historia de Marta siempre a través de un narrador omnisciente y usando continuos saltos en el tiempo, manejados con maestría y sin confusión y que nos harán viajar desde la Guerra Civil hasta el momento actual. De esta forma, la autora irá tejiendo una sutil telaraña de personajes y hechos aparentemente inconexos que sólo al final cobrarán su pleno sentido.

Mención especial merece la fantástica ambientación de la novela en el fascinante mundo de la pintura. Probablemente este aspecto lo he disfrutado de una forma especial ya que es un tema que personalmente me interesa muchísimo por lo que supongo que mi percepción ha podido ser distinta  a la de otros lectores. Mar Mella nos muestra el mundo del arte en sus dos aspectos principales: por un lado, la parte creativa en sí misma, y su posterior conservación y restauración. La autora integra de forma natural explicaciones técnicas muy interesantes sobre temas tales como pigmentos, un pasaje que me ha parecido fascinante. Y, por otro lado, entra también en los aspectos económicos del arte llevándonos de paseo por el complejo y deslumbrante mundo de las subastas, dándonos a conocer muchos de sus claroscuros con sus enredos e intrigas.

El estilo de Mar Mella es sencillo y elegante. Que sea su primera novela me ha resultado realmente sorprendente porque es tal el oficio que demuestra en todos los aspectos del libro, desde lo ya comentado sobre estructura y perfil de los personajes, pasando por el manejo del ritmo narrativo, la dosificación de la intriga, la forma tan natural de trasladar al lector la ingente labor de documentación que se respira en el libro, su forma de plasmar todo eso sin abrumar y aburrir sino dando lugar a un libro con el que es imposible no aprender mientras te deleitas con su lectura. Y por si todo esto fuera poco, la autora culmina con un final inesperado que me dejó con la boca abierta. Un cierre sorprendente que no por ello deja de ser coherente con el desarrollo del libro.

Así que sin duda alguna recomiendo "Azul Vermeer" a todo tipo de lectores porque es un libro distinto, un libro con una historia muy bien contada que te atrapa sin remedio, pero lo que realmente lo hace especial es que esconde entre sus páginas mucho más de lo que aparenta.

Reto 25 españoles

Ficha técnica
Título: Azul Vermeer
Autora: Mar Mella
Editorial: Martínez Roca
Nº de páginas: 448
ISBN: 9788427040687